Hay recetas que parecen pensadas para cuando el tiempo escasea pero las ganas de disfrutar sobran.
Esta ensalada es una de ellas: fresca, simple y con ese equilibrio perfecto entre lo dulce del durazno, la suavidad del queso y la intensidad del jamón crudo.
Ideal para una mesa llena de aperitivos, donde cada bocado cuenta una pequeña historia. Podés servirla en un plato grande o en pinchos individuales, para que sea más fácil de picar y compartir.
Perfecta para reuniones con muchos comensales y poco tiempo o para una cena romántica donde el detalle importa más que el esfuerzo. Porque a veces, la elegancia está en lo simple.
Detalles
4 porciones
10 minutos
180/200 kcal
Ingredientes
Bocconcinos 200gr
Durazno maduro 1
Jamón crudo 150gr
Nueces 50gr
Miel c/n
Aceite de oliva c/n
Sal y pimienta c/n
Indicaciones
- Colocá en un plato hondo los bocconcinos. Luego, descarozá un durazno (podés pelarlo si querés) y cortalo en trozos similares al tamaño del queso.
- Agregá el jamón crudo, unas nueces, sal y pimienta negra recién molida.
Como toque final, un hilo de aceite de oliva y un suave baño de miel líquida para realzar todos los sabores.
Listo: lo ideal es acompañar con pinchos para que cada comensal pueda servirse un poco de todo.
